Desde que descubrí Fortnite me enamoré de ese juego, al inicio jugaba solo y con el tiempo siempre trataba de introducir a mis amigos a jugar conmigo. Así fue pasando temporada tras temporada cuando llegó la Temporada 9 del Capítulo 1 y ahí la vi, la skin más bella que haya visto, la skin de Demi.
Pese a que siempre había tratado de ahorrar dinero y prometerme no gastar en juegos que ya de por sí eran gratis esa vez lo hice. Recargué pavos en mi cuenta de Epic Games y compré el pase de batalla.
Una vez obtuve el pase me dispuse a subir de nivel constantemente ya que la skin de Demi se desbloqueaba en el nivel 87. Y con el transcurso de un par de semanas la obtuve. Ni bien la conseguí me la equipé en el inventario y desde entonces ha sido la skin que más he usado en el Battle Royale.
Actualmente estamos en el Capítulo 2 Temporada 7 y me alegra decir que no soy el único de mis amigos que juega Fortnite. Tengo un amigo llamado Franklin con el cuál participaba siempre en torneos y nos divertimos todo lo que podemos.
Algo que siempre me daba risa y a la vez cringe era cuando mi amigo Franklin me pedía que me equipe con mi skin Demi y haga el baile de "Caderas Fiesteras". No lo culpo, era una skin hermosa que haría babear a cualquier hombre de ser real.
Entonces algo pasó, Franklin, el cuál siempre decía que me envidiaba por tener a Demi y el no, me invitó a jugar Fortnite, según el, de una forma nueva y envolvente, pero que para eso teníamos que ir a su casa ya que el dispositivo que había comprado lo tenía ahí.
Lo que decía me llamó la atención así que acepté ir a su casa y al llegar me di con la sorpresa que tenía 2 PC gamer.
"Maldición Franklin ¿por qué no me dijiste que tenías estás PC antes?" le dije. Y me respondió que era una sorpresa para poder estar más cómodos al momento de jugar.
Sus pc eran bonitas y parecían que tenían todo tipo de componente necesario para jugar Fortnite con los mejores gráficos. Sin embargo los audífonos que se conectaban a la PC tenían un dispositivo extraño que los rodeaba.
Cuando le pregunté a Franklin para que eran esas cosas me dijo que eso era lo que hacía más envolvente la experiencia. Pensé que se refería a un nuevo sistema de audio que haría más envolvente el sonido o algo por el estilo así que no pregunté más.
Lo bueno de Franklin era que vivía solo así que nadie nos iba a preguntar qué a qué hora íbamos a dejar de jugar como pasaba en casa de otros amigos. Así que me senté en una de las PC, abrí Fortnite y entré a mi cuenta. Franklin hizo lo mismo, y cuando ambos estábamos en el lobby me indicó que abriera el menú de selección de modos ya que tenía que mostrarme algo en el modo creativo.
Así lo hice, entre al modo creativo y puse el código que me indicó. "Envolvente" se llamaba la Isla del código que había puesto él. Me dijo que me ponga los audífonos bien. Me preguntó si tenía puesta mi skin de Demi, lo cuál me pareció raro, pero le dije que si, ya que con esa siempre juego y finalmente me dijo que él usaría su skin de Kratos, que entremos ambos a la vez dándole a iniciar, y así fue, ambos, con los audífonos extraños bien puestos, le dimos a iniciar.
De pronto todo se puso negro, la visión que tenía de la PC frente mío se desvaneció y poco a poco sentí como los extraños audífonos que tenia puesto en mi cabeza me empezaron a quemar tanto que estaba a punto de quitármelos, pero los brazos de Franklin se posaron sobre mi cabeza haciendo que éstos se queden en su lugar a la fuerza. El dolor fue tanto que me desmayé.
Me encontraba tendido en el suelo cuando de pronto Kratos, si, el de God of War apareció frente a mi, me dijo si me encontraba bien y seguido de eso empezó a hacer el baile "Default" de Fortnite. Les juro que pensé que Franklin me había dado alguna clase de droga alucinógena pero Kratos se empezó a reír y dijo que era Franklin.
Dijo que esa era la experiencia envolvente a la que se refería, entrar al mismo Fortnite. Entonces por un momento dejé de ver a mi amigo Franklin en el cuerpo de Kratos y me centré en mi. Si él habia escogido su skin de Kratos y era Kratos, entonces yo.
Miré hacia abajo y vi dos senos pegados a mi pecho, mi cintura era delgada, mis piernas eran las más sexys que había visto en mi vida. Mi brazo izquierdo era fino y con unas uñas largas y bien pintadas, mi brazo derecho había sido reemplazado por una prótesis roja de metal y mi trasero era gigante en comparación a cuando era hombre. Con suma rareza traté de mover mi brazo prótesis hacia mi entrepierna y dónde usualmente estaba mi pene había una vagina cubierta por una tanga la cual al moverme sentía que se metía entre mis nalgas. Le levanté y fui al espejo más cercano y al verme concluí lo que sospechaba, me había transformado en mi skin de Demi.
-Oye Franklin ¿hay alguna manera de que cambie a alguna skin masculina que tengo en mi casillero? Pese a que la skin de Demi es super hermosa y sexy no me siento totalmente cómodo en el cuerpo de una mujer y menos cuando me falta un brazo de carne y hueso- le dije mientras manoseaba mis modestos senos.
Franklin ignoró mi pregunta y en lugar de eso dijo que llegaría un invitado más. Sentía vergüenza que alguien me viera con un vestido rojo bien apretado sobre mi nueva figura, pero supuse que el invitado no sabría quien era yo realmente. Finalmente sonó una alerta en la Isla y en medio de nosotros apareció de la nada Master Chief.
El se acercó a mi mientras yo retrocedía ligeramente intimidado por su gran tamaño, caminó alrededor mío, posó sus manos sobre mis senos a lo cuál mi respuesta fue empujarlo y se fue riendo a dónde se encontraba Franklin.
-Ya me voy Franklin, estoy incómodo en este cuerpo, sácame del juego- le dije, pero volvió a ignorame. Entonces me acerqué a él enojado, lo empujé y no pude ni moverlo, puesto que era Kratos.
-Ya va siendo hora de decirte la verdad, este es tu nuevo hogar. Siempre estás presumiendo tu skin de Demi y no puedo negar que tengo un fetiche por esa skin, así que de ahora en adelante serás ella por siempre- me dijo. -Master Chief me ayudó a crear esta máquina para poder meternos en el juego, así que le prometí que tu primera vez también la podría compartir él- continuó.
-¿A que te refieres con primera vez?- le dije. Pero mi duda quedó clara al ver cómo Kratos y Master Chief se quitaban la ropa quedado desnudos. Traté de huir pero corrieron tras de mi, Master Chief me atrapó por las caderas y me alzó como si se tratara de una pluma. Franklin, cuál alguna vez consideré mi amigo apareció por delante mío, abriendo mis piernas con extrema facilidad. Ambos rasgaron las pantys que tenía puesta y empezaron a penetrarme.
Al inicio traté de empujarlos y moverme como una loca, puesto que me estaban violando, pero con el bombeo constante que sentía en mi entrepierna el dolor se fue transformando en placer, mi nueva vagina lubricaba rápidamente y permitía el paso de estos grandes miembros ante lo cuál empecé e emitir gemidos muy femeninos sin querer. Ellos lo interpretaron como si estuviera cediendo y me quitaron la ropa que me quedaba mientras aumentaban los bombeos en mi entrepierna.
Finalmente después de un tiempo Master Chief se quedó completamente tiezo con su pene dentro de mi, supuse que se le fue el internet, así que aproveché la oportunidad y logré safarme de ellos. Empecé a correr pero lamentablemente tropecé y cuando voltee a ver si Kratos me seguía ya estaba sobre mi, con su gran miembro colgando al lado de mi cara.
Antes de que pudiera levantarme si quiera me mantuvo quieta arrodillada en el lugar y me obligó a darle una mamada. Traté de liberarme nuevamente pero mi cuerpo femenino no tenía la fuerza suficiente si quiera para moverlo. Después de unos minutos podía sentir como el miembro de Franklin tenía espasmos lo cuál no significaba nada bueno para mí, traté de liberarme de él pero eso solo hizo que metiera su pene hasta mi garganta liberando todo su semen en el acto.
Empecé a llorar mientras sentía como su semen bajaba por mi garganta hasta llegar a mi estómago. Y cuando finalmente dejó de correrse en mi sacó su pene de mi boca. Pensé que finalmente había terminado conmigo pero me puso en 4 patas y empezó a cogerme en estilo perrito para finalmente volverse a correr dentro de mi. -Te veo en unos días- me dijo Franklin antes de que su skin se desvaneciera y me quedara completamente solo en esta isla.
Después del shock inicial y haber llorado por horas descubrí que no había nada en esta isla, yo era la única persona que estaba aquí, y que no había aparentemente forma de escapar. Así fueron pasando varios días hasta que Franklin regresó, nuevamente con su aspecto de Kratos. Traté de huir de él pero simplemente me atrapó, me dijo que lamentaba haberme violado pero que ésta vez solo quería conversar.
En resumen, me comentó que yo sería su juguete sexual, pero que eso no le bastaba, él quería que yo sea la que tenga iniciativa, la que suplique que la penetren y que se corran dentro de ella. Que esto era un servidor separado del resto de islas de Fortnite y que esos días que yo había estado solo explorando la Isla en realidad fueron unas horas en el mundo real, y que el podía controlar que tan rápido pasaba el tiempo aquí y que no envejeceria. Así que sería mejor que me haga la idea de ser su puta digital privada o me dejaría 100 años sola a ver si enloquecía.
Le dije que eso jamás iba a pasar, yo era un hombre, que me estaba mintiendo y que me libere de una puta vez, ante lo cuál desapareció. Pasaron unas semanas y estaba sola en la Isla, lo único que podía hacer para entretenerme era explorar mi nuevo cuerpo y eso hice. Era todavía raro verme desnuda en el espejo y saber que ese hermoso reflejo era yo.
Pasaron 2 años y empezaba a sentirme solo, ya no dudaba de lo que decía Franklin cuando de pronto por arte de magia apareció delante mío con su característica skin de Kratos. -Hola nena, han pasado 2 años para ti pero 5 minutos para mí ¿ya estás lista para pedirme que te folle?- me dijo. Empecé a llorar al verlo pero le dije que no, que se fuera al demonio, le supliqué que me saque de aquí ante lo cuál puso una cara de enojo y simplemente desapareció.
Ésta vez Franklin no volvió hasta 20 años después. Ya había olvidado como era estar con otra persona, así que fui a abrazarlo apenas lo ví para sentir el contacto humano que tanto me hacía falta. Me hizo nuevamente la pregunta que me hizo hace tantos años, a lo cuál le respondí -¿Podrías follarme Franklin?- ante lo cuál él se desvistió, me puso en 4 patas y empezó a bombear su virilidad dentro de mi. Y así paso el tiempo, Kratos aparecía cada día para liberar su semen dentro mío, ya sea en mi boca, en mi vagina, en incluso en mi cavidad anal.
Con el paso el tiempo he ido sucumbiendo ante los placeres que este cuerpo femenino me exige. Y lo sé, ya que me mojo automáticamente cada que lo veo. El hecho de pedirle que me folle dejó de ser humillante hace mucho, y ahora solo es una mera petición para que me llene de placer.
Yo sé que el puede cumplir sus amenazas y dejarme sola por varios años hasta enloquecer, pero sinceramente ¿cómo podría vivir varios años sin su pene dentro de mi? Eso si que me haría enloquecer.
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Hola queridos lectores, a esta historia si le puse mas ganas xd espero la disfruten y de paso me comenten, si es que juegan Fortnite ¿Cuál es su skin favorita? o en todo caso ¿En el cuerpo de que skin de Fortnite te gustaría estar? En mi caso la de Safari, se me hace bien bonita :3 Les dejaré abajo la imagen por si no la conocen. Nos vemos en mi siguiente historia, que será quien sabe cuando xd
