Una Mikasa Real

Hoy en "Cosas del Body Swap" una nueva historia. Se me dió por escribir. Y bueno, no será la mejor historia pero espero la disfruten. Besito besitos chau chau, buenas noches.

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Antes de irme a dormir mire a mi ventana y pasó volando una estrella fugaz. Al verla no dudé ni un solo segundo en el deseo que quería pedir.

"Deseo que Mikasa de Shingeki no kyojin sea real y poder disfrutar de su cuerpo todo el tiempo que quiera", dije con entusiasmo, sin embargo, al terminar de decir la frase no pasó nada, así que me sentí estúpido por pensar que una estrella fugaz cumpliría mi deseo.

Ya no le di más vueltas al asunto y me fui a dormir. Esa noche soñé que volaba con mi equipo de maniobras tridimensional y mataba Titanes junto a Mikasa. Grande sería mi sorpresa cuando al despertar sentí un peso adicional en mi pecho y me percaté que tenía un par de senos.

Inmediatamente me llevé la mano a la entrepierna para corroborar si mi amiguito seguía ahí y casi lloro al darme cuenta que ahora solo tenía una vagina.

Corrí al espejo y me di cuenta que era una chica con rasgos asiáticos y, dios, yo era Mikasa. La estrella fugaz había malinterpretado mi deseo y me dió un cuerpo femenino equivalente al que sería el de Mikasa en la vida real.

A decir verdad la curiosidad me ganó, por suerte tenía un disfraz guardado en mi armario de la legión de reconocimiento y me lo probé frente al espejo. Si, iba a extrañar mi pene y ser hombre, pero no voy a negar que me veía muy sexy y empecé a sentir húmeda mi entrepierna.

Para mala suerte mía, justo en aquel instante, mi roomate regresó a nuestro departamento y se dió con la sorpresa de una chica semi desnuda en el departamento que se parecía a Mikasa. Le conté lo que había pasado y estaba medio dudoso de la historia que le dije, pero me terminó creyendo.

Al día siguiente fue raro despertar y pensar que todo seguía igual. Pero el simple hecho de despertar y poder manosearme los senos era lo mejor. Cuando decidí seguir durmiendo un rato más mi amigo empezó a gritar desde el piso de abajo diciendo que vaya corriendo.

Al correr por las escaleras no me percaté que éstas estaban mojadas y salí volando 3 metros sobre ellas. Pensé que iba a morir pero mi amigo me atrapó en sus brazos justo al caer.

"Que bueno que te atrapé" me dijo, "Ahora ve a mi cuarto y espera ahí".

No sé por qué hice lo que me dijo, pero mientras más pensaba la actitud sumisa con la que acepté sus órdenes, más preocupado estaba.

Después de unos 5 minutos apareció mi amigo, desnudo y lo único que dijo fue "chúpala de una vez". No sé por qué mi cabeza se sintió rara y de inmediato me agaché a agarrar su pene con mis manos y llevármelo a la boca. Sabía raro, era la primera vez que agarraba uno, no quería hacer esto pero mi mente me decía que lo hiciera. Luego de un rato de estar sube y baja a través de su pene jugando con mi lengua, él me agarró de atrás de la cabeza para evitar que me moviera, y sentí toda su descarga de semen en mi garganta.

"Tragatela toda bebé, a ti te encanta el semen" me dijo, y las náuseas que sentí desaparecieron por esa simple orden que me dió.

Han pasado ya unos meses, y descubrí que el deseo de la estrella fugaz no sólo me dió un cuerpo igual al de Mikasa, sino que me dió también su sentido Ackerman, sobretodo el de obedecer y sentirme la esclava de aquel que me salve la vida.

A veces me pregunto si mi amigo habrá mojado las escaleras a propósito para que me resbalara y él me atrapara, o fue solo una coincidencia.

Ahora lo único que sé es que él me usa como su esclava personal, como su depósito de semen cada que está aburrido o cansado. Y no puedo dejar de obedecerlo, sé que está mal, pero algo dentro de mi mente me dice que le haga caso, y a decir verdad empiezo a disfrutar su pene.

No soy más que una simple muñeca para él, una que hace lo que quiere, las poses sexuales que quiere, y sin reclamos se somete a él.